sábado, 4 de octubre de 2008

La delicia de morder mis labios.


Se sentó frente a mi cruzo sus piernas con un leve movimiento de su mano izquierda paso sus dedos por su cabellera lisa y rubia dejándola detrás de su oreja. Desabrocho el primer botón de su blusa, hacia calor, me miraba de una forma desafiante, yo temblaba por dentro pero mi cara de dureza y control borraba cualquier indicio de temor; pero ella lo sabia, controlaba todo, me estudiaba, sabía lo que sentía y pensaba, era la mezcla perfecta entre Hannibal Lecter y Catherine Tramell, dejo su bolso costoso en un costado de su asiento y me pregunto:

-¿Esta averiado el aire acondicionado?

-No – le respondí. – ¿Empecemos la entrevista?-

-Como tú quieras – me dijo, con esa voz tan carnal y almibarada.

Saco un cigarrillo de su cigarrera, su encendedor plateado hacia juego con su collar, lo encendió y no me aparto la mirada, podría exagerar diciendo que ni pestaño. Su labial carmín quedo impregnado en la colilla.

Se le acusaba del asesinato y abuso sexual a una menor de 16 años, se le culpaba también de la muerte de su esposo, dos supuestos amantes y de una prostituta.

¿Por qué el afán de matar? – le pregunte

Me respondió con una leve carcajada y luego agrego:

-No seas ingenua, la muerte es lo único real y en lo único que confío. A veces el sexo es real pero no me da tantos orgasmos como esa piel pálida, ese frío característico y ese olor a sangre tan dulce.

Tiro el cigarro al piso , con su pierna derecha y su taco negro de charol apago lentamente el cigarro; se puso de pie , se acerco muy rápidamente , me tomo del cuello , trate de apartarla , pero no pude , agarro mi cara y junto sus labios con los míos , paso su lengua sobre mis labios , la bese incontrolablemente , bajo el cierre de mi vestido , su mano se elevaba entre mis piernas hasta a llegar a lo mas intimo de mi ser , desabroche su blusa , me agarro y me tiro contra el escritorio y fue en ese instante cuando perdimos completamente la razón.

Jamás había sentido algo parecido; al terminar ella se vistió muy apresuradamente y al ponerse su abrigo me dijo:

- A veces el sexo puede ser más placentero que la misma muerte querida.

miércoles, 1 de octubre de 2008

Placer Culpable


Creo estar parado frente al más eminente y encantador hombre , sincero, un poco pasado de moda con esa camisa a cuadros donde una mancha de aceite envuelve el perimetro cuadrangular de ese algodon.

3 tiros al aire

10 pasos al norte

2 movimientos de mandibula

brazos extendidos

y la tipica cancion de AMOR de fondo

y flota entre particulas de polen y polvo, solo falta un solo segundo se estrella contra el suelo y rie su figura teñida de carmin , su boca con de color burdeo mezclado con mierda, en sus ojos pequeñas lagrimas van brotando, me mira , pero solo yo lo veo , me sonrie , no puede levantarse, trata pero es inutil , lanza un quejido , tira su ultima señal , me llama , me dice :
NADA ES PARA SIEMPRE.


TE LO MERECES.


Casi al borde de rebentar en lagrimas y a punto de dar ese aterrador grito silencioso , junto mis labios con los suyos me da su ultimo aliento , su sangre se impregna en mi.


ya te olvide?